Un soldado me conducía por una escalera hacia el último piso de un alto edificio.
yo estaba desnuda y con mucho miedo pues no sabía hacia donde me llevaban.
Al llegar arriba, estaba en una amplia habitación con un...ropero antiguo, me obligaba un militar como Pinochet a tenderme boca abajo en una mesa grande y redonda y del antiguo ropero sacaban unas alas que me amarraban a la espalda. Una vez con las alas era forzada a pararme al borde de un abismo al cual tenía que lanzarme. Era muy difícil tener el valor de hacerlo. Pero una vez habiéndome lanzado llegaba al otro lado del abismo, al otro borde, ayudada por las alas. Al otro lado caía en una especie de mar o agua agitada llena de huesos y calaveras putrefactas, trataba de avanzar lo más rápido posible pues escuchaba como...